Francis Mc Cawley: “Cierre de Maersk Container Industry San Antonio, debiera hacer reflexionar a todos”

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Imagen foto_00000001Ex director de MCI en Chile y responsable de la construcción de la fábrica se refirió a su clausura

 

Impacto produjo el anuncio de Maersk Container Industry San Antonio (MCIS) poner fin de manera irreversible a las operaciones de fabricación de contenedores refrigerados en sus instalaciones de Malvilla, en San Antonio, decisión que implica la pérdida de su fuente laboral a 1.209 trabajadores.

 

Francis Mc Cawley, ex ejecutivo de Maersk Container Industry, empresa con la que estuvo ligado por 23 años y donde llegó a ser su representante para Latinoamérica, manifestó sus impresiones sobre el cierre de la fábrica, las que resultan de especial relevancia, considerando que fue el responsable de su construcción cuando ejerció el cargo de director general de MCI en Chile entre los años 2012 y 2015.

 

¿Era esperable una noticia de estas características?

-Nunca una mala noticia como esta es esperable. Ahora en todo proyecto y emprendimiento, el cierre de una operación es un riesgo y una posibilidad, y hay que tenerlo muy presente. En este caso y obviamente por la vinculación que tuve con él, escuchaba y recibía información que me tenia muy preocupado, especialmente en el tema laboral.

 

¿Cómo una inversión tan reflexionada puede ser desechada a pocos años de haber sido puesta en marcha?

 

–Este proyecto se evaluó entre los años 2008 y 2011, cuando se decidió llevar a cabo el proyecto. La construcción de la fábrica duro un poco más de 3 años- no exenta de problemas- y después, el año 2015 se inició la marcha blanca, ajustes y pruebas.

 

La planta nunca alcanzó su plena producción por variadas razones: técnicas/operacional y laborales.

 

Efectivamente la inversión fue bien reflexionada y evaluada, pero creo que en el tema laboral nos equivocamos.

 

¿Realmente las condiciones del mercado cambiaron demasiado desde que se planificó la fábrica hasta después de su puesta en marcha?

 

-Si claro. La industria naviera desde hace varios años vive una fuerte crisis. Mucha oferta y fletes muy bajos, lo que ha obligado a las navieras (que compran contenedores) a posponer la renovación de sus unidades refrigeradas.

 

Antes los reefers se renovaban a los 10 o 12 años, hoy los hacen durar entre 15 y 20 años. Por eso la demanda ha bajado muchísimo y, por otra parte, la oferta de unidades en China ha aumentado con nuevos proveedores. Pero lo anterior, en mi opinión, no es lo que más pesó en el cierre de la planta.

 

A su parecer ¿qué tanto podría haber influido la huelga producida en octubre del año pasado?

 

Una huelga es un acontecimiento que nadie quiere. Ahora si esta sucede en una empresa que está partiendo, con dificultades técnicas, perdiendo mucho dinero, sin alcanzar los niveles de calidad y producción necesarios para competir, con una situación de mercado desfavorable y otros problemas, es de una gran irresponsabilidad ir a huelga por incrementos y beneficios que la empresa no está en condiciones de solventar.

 

El cierre de la fábrica fue por una serie de situaciones, acontecimientos y condiciones arriba mencionados. Ahora, sin lugar a duda, la huelga y la violencia desatada en los accesos de la planta, fue una pésima y lamentable situación, que junto a la baja productividad, en mi opinion, apuró la decisicion del cierre de la planta.

 

En lo personal ¿qué sensación le provocó el anuncio del cierre de la fábrica?

 

Primero que todo una gran pena por los trabajadores y sus familias. Me consuela que mucha gente aprendió un nuevo y buen oficio, que sin duda les ayudara para encontrar un nuevo trabajo y de calidad, mucho mejor que el que tenían antes de entrar en la fábrica. Trabajaron con equipos y maquinaria de primer nivel y tecnología, esto es una gran experiencia.

 

En lo personal muy decepcionado por la pérdida de una fábrica icono en la industria chilena. Nos costó muchísimo trabajo traerla a Chile y construirla. Esta lamentable situación debiera hacer reflexionar a todos: Estado, gobiernos, autoridades políticas, regionales, provinciales y comunales de turno, directorio, ejecutivos, trabajadores, dirigentes sindicales, gremios empresariales, proveedores., etc., en cuanto a qué pudimos haber hecho mejor para que esto no sucediera y qué tenemos que hacer o cambiar para que esto no vuelva a pasar.

 

Fuente: Mundo Marítimo

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